Tala de árboles en la Galería Popular de Valledupar genera polémica: denuncian falta de socialización y transparencia
La tala de once árboles en inmediaciones de la Galería Popular de Valledupar, realizada durante el último fin de semana de junio, ha desatado una ola de críticas por parte de ciudadanos y organizaciones ambientalistas que denuncian la ausencia de socialización y dudas sobre la ejecución del procedimiento.
El Foro Ambiental del Cesar fue una de las primeras voces en pronunciarse. Según sus voceros, se enteraron del hecho por denuncias directas de la comunidad. “Nos informaron el sábado. Fue la gente de la misma galería quien dio la alerta”, indicaron. A partir de ese momento, el grupo ambientalista contactó a las autoridades correspondientes y comenzó su propia verificación de los hechos.
De acuerdo con los hallazgos del Foro, el permiso fue concedido mediante la Resolución 011 del 21 de febrero de 2025, emitida por la Corporación Autónoma Regional del Cesar (Corpocesar). En dicho documento se autoriza al municipio de Valledupar a realizar una “intervención forestal consistente en la tala de once (11) árboles” ubicados en la carrera 7 #18A, en el sector de la Galería Popular.
La solicitud fue presentada por la Secretaría de Desarrollo Económico, Medio Ambiente y Turismo, el 20 de noviembre de 2024. El informe técnico de Corpocesar justificó la intervención argumentando que los árboles, principalmente de las especies Aceituno (Simarouba amara) y Uvito (Syzygium cumini), presentaban raíces expuestas que estaban deteriorando la infraestructura del andén y generaban riesgos para la comunidad.
Aunque el informe también señala que los ejemplares estaban en mal estado fitosanitario y que sus ramas interferían con redes eléctricas y de telecomunicaciones, se reconoce que los árboles contaban con follaje abundante en sus copas y que algunos signos de afectación eran moderados.
Uno de los puntos más sensibles para los ciudadanos y el Foro Ambiental ha sido la falta de socialización previa. “La comunidad no fue informada adecuadamente. La tala se hizo de forma sorpresiva y sin consulta”, sostienen. De hecho, la misma resolución exige que la medida sea divulgada por escrito y a través de medios accesibles a la comunidad, además de socializarse previamente con los residentes del sector, algo que según las denuncias no se cumplió.
Otro aspecto que genera inquietud es el incumplimiento de los procedimientos posteriores exigidos por Corpocesar. La Alcaldía estaba obligada a notificar a la entidad ambiental el inicio y la finalización de los trabajos, así como presentar las evidencias correspondientes, requisitos que, según el Foro, no fueron acreditados.
Además, los ambientalistas cuestionan los criterios utilizados para seleccionar los árboles talados. “Existen otros ejemplares en peor estado y en zonas más transitadas de Valledupar que no han sido intervenidos. La priorización no parece clara ni coherente con los riesgos reales”, argumentan.
La polémica ha puesto sobre la mesa la necesidad de fortalecer los canales de participación y veeduría en decisiones ambientales que impactan el espacio público. El Foro Ambiental exige que las autoridades municipales y ambientales garanticen procesos más transparentes, con información oportuna y la participación activa de la ciudadanía antes de ejecutar este tipo de medidas.
Mientras tanto, sectores de la comunidad siguen esperando una respuesta oficial por parte de la Alcaldía de Valledupar sobre los protocolos seguidos y las razones específicas para no haber informado con antelación a los habitantes del sector.
