Histórica condena: Álvaro Uribe Vélez sentenciado a 12 años de prisión domiciliaria por fraude procesal y soborno

En una decisión sin precedentes en la historia judicial de Colombia, el expresidente Álvaro Uribe Vélez fue condenado este viernes a 12 años de prisión domiciliaria por los delitos de fraude procesal y soborno en actuación penal.
El fallo fue proferido por la jueza Sandra Liliana Heredia Aranda, del Juzgado 44 Penal del Circuito de Bogotá, quien determinó que Uribe indujo en error a la justicia mediante maniobras ilegales, incluyendo la presión a testigos y ofrecimientos indebidos para cambiar sus declaraciones.
Además de la pena de prisión, el exmandatario deberá pagar una multa superior a 3.400 millones de pesos y quedó inhabilitado para ejercer cargos públicos durante más de ocho años.
La jueza también ordenó que la ejecución de la sentencia sea inmediata, bajo la figura de detención domiciliaria, sujeta al cumplimiento de una póliza judicial. La defensa del expresidente anunció que apelará la decisión ante el Tribunal Superior de Bogotá.
El proceso judicial se remonta al año 2012, cuando el entonces senador Iván Cepeda denunció que personas cercanas a Uribe habrían buscado manipular a exparamilitares para desprestigiarlo. A raíz de esa denuncia, Uribe interpuso una contrademanda contra Cepeda por presunta manipulación de testigos. Sin embargo, la Corte Suprema de Justicia archivó la denuncia contra Cepeda y, en su lugar, abrió una investigación formal contra Uribe.
En 2023, la Fiscalía General de la Nación presentó el escrito de acusación contra el expresidente, dando inicio a un juicio oral que se extendió por más de un año, en medio de controversias jurídicas, pruebas testimoniales y señalamientos de presión a excombatientes.
De acuerdo con el fallo, Uribe incurrió en fraude procesal al presentar ante las autoridades judiciales pruebas que fueron obtenidas de manera irregular, con el fin de desviar investigaciones. También fue hallado responsable del delito de soborno en actuación penal, al comprobarse que se ofrecieron beneficios y dádivas a exparamilitares para que modificaran sus versiones, hechos en los que fue clave la actuación del abogado Diego Cadena, también procesado por este caso.
La condena convierte a Álvaro Uribe Vélez, presidente de Colombia entre 2002 y 2010, en el primer exmandatario en la historia del país en recibir una condena penal. Aunque se trata de un fallo de primera instancia, su impacto político, jurídico e institucional ya se considera trascendental.
El caso continúa su curso con las etapas de apelación anunciadas por la defensa, pero por ahora, Uribe deberá cumplir la condena en su residencia, mientras se define el futuro del proceso en segunda instancia.
